La Compañía de Electricidad de Tokio, propietaria de la dañada central nuclear Fukushima Uno, ha inyectado polímeros con la capacidad de absorber agua en la grieta de un foso de la planta para detener el flujo de agua radiactiva hacia el océano.
La Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial de Japón afirma que la compañía eléctrica llevó a cabo una operación de emergencia de unos 40 minutos de duración el domingo por la tarde. El organismo afirmó que no ha visto cambios en el flujo de agua filtrada de la central después de la inyección de los polímeros.
El sábado la compañía eléctrica descubrió que se estaba filtrando agua radiactiva a través de una grieta en un foso de hormigón que contiene cables de electricidad situado cerca de la entrada de agua del reactor número 2. El nivel de radiación en la superficie del agua del foso era de unos mil milisieverts por hora.
La empresa espera poder recoger el agua sobrante en un tanque de almacenaje y otras instalaciones del complejo. También dijo que el sábado por la noche comenzó a reducir la cantidad de agua que está inyectando en los edificios de los reactores números 1 y 2 para enfriarlos, dado que sus temperaturas y presiones se han estabilizado.
Fuente NHK
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